Es el primer año que preparo esta tarta y os aseguro que no será el último. Suele cocinarse para la cena de Thanksgiving y está deliciosa.
Es perfecta tanto para servir de postre con un poco de nata, mascarpone o creme fraiche o por qué no también para acompañar a algún plato salado (ya sabéis que me encanta la combinación dulce/salado).
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La podéis preparar de un día para otro y sí queréis ahorrar tiempo podéis utilizar una masa quebrada ya hecha.
Si os animáis con la masa casera y os sobra podéis hacer galletas con ella.
Tips: Hornea la masa sola antes de añadir el relleno. Hazlo unos 15 min a 180 grados sin ventilador.
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Ingredientes:
450 g de calabaza asada
3 huevos
75 ml de leche entera
50 ml de nata
Una cucharadita de canela en polvo
Una cucharadita de jengibre en polvo
90 g de miel o sirope de arce o agave
40 g de azúcar moreno de caña integral
Opcional: las especias que os guste como clavo o cardamomo.
Para la masa:
250 g de harina integral
100 g de azúcar moreno de caña integral
100 g de mantequilla fría en cubos
1 huevo
20 ml de agua
Una pizca de sal
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Espero que os guste mucho y os acompañe en ocasiones especiales y familiares.
Elaboración:
Preparamos un puré de calabaza. Yo lo hago casero. Aso la calabaza en el horno a 200 grados durante al menos media hora o el tiempo que sea necesario hasta que esté blandita.
Preparamos también la masa casera. Con azúcar moreno, harina integral y mantequilla. Mezclamos todo desmenuzando con pellizquitos la mantequilla y cuando tiene un tono marrón, añadimos el huevo y el agua. Integramos todo bien hasta tener una masa compacta que no se pegue en las manos y a la que le doy forma de bola.
La guardamos en la nevera y la reservamos durante al menos 15 minutos. Después la estiramos en un papel de horno y la colocamos en el molde en el que vayamos a cocinar la tarta. Pinchamos la base y la metemos en el horno a 180 grados durante 15 minutos.
La calabaza ya está lista, esperamos a que se atempere y le quitamos toda la carne.
La trituramos con huevos, miel, azúcar, nata, leche y las especias que os dejo en la descripción. Trituramos hasta tener una masa homogénea, y ya tenemos listo nuestro relleno de tarta de calabaza.
Sacamos la masa del horno, vertemos la crema calabaza y volvemos al horno otra vez. Donde la tenemos al menos 50 minutos (aunque el tiempo dependerá del tipo de horno).
Yo suelo prepararla de un día para otro. Así que es perfecta para cuando tengáis una cena con amigos o invitados y no queréis complicaros con el postre. Lo dejáis preparo el día anterior y listo.
Si quieres ver el paso a paso de esta receta en imágenes, está disponible en mi Instagram, @foodtropia
